miércoles, 21 de mayo de 2014

" 5 OREJAS......, PERO EN 5 TARDES". LO MEJOR DE LA TARDE EN MADRID PARA JUAN DEL ÁLAMO.

-MADRID. 13º FESTEJO DE LA FERIA DE SAN ISIDRO. CORRIDA DE TOROS. En tarde desapacible de temperatura, con lluvia en varios momentos de la lidia y con rachas de viento que molestaron el los trastos de los toreros, se ha celebrado este festejo de la Feria de San Isidro. Corrida de La Prensa, que ha visto como se llenaba la plaza, a pesar de las condiciones climatológicas adversas, en más de sus tres cuartos de aforo, destacando entre todo el público la barrera ocupada por la Infanta Doña Elena, una vez más en esta plaza, dándole categoría a la tarde, al festejo y a nuestra Fiesta Nacional. 
Se ha lidiado una corrida correctamente presentada, destacando las "tremendas" caras, en la que el pitón astifino y de larguísimas dimensiones destacó. En cuanto al comportamiento, unos flojos, otros se dejaron, con mayor o menor tranco y con poco fondo, la mayoría. Destacó el lidiado en tercer lugar, más que por la condición del animal por el tratamiento de su matador.
Este fue el resultado del sorteo matinal:

El resultado de los espadas ha sido el siguiente:
Manuel Jesús El Cid (vestido de tabaco y oro), silencio y silencio.
David Fandila "El Fandi" (de nazareno y oro), palmas tras aviso y palmas.
Juan del Álamo (de rosa palo y oro), una oreja y silencio.
Un Cid apático en su primer toro, como sucedió en su primer comparecencia de San Isidro, y un público que medía y pitaba en varios momentos de su escasa faena, matando el de Salteras a la primera en su primero y pinchando a un segundo que tampoco le ayudó. Si que destacó en este segundo un quite por delantales muy aplaudido.
El Fandi, estuvo "Olímpico" en sus dos toros en el tercio de banderillas, llegando a poner hasta cuatro pares en su segundo oponente. Hubo de todo, público que ovacionó al torero y público (el 7) que lo pitó.Con la muleta poquito que destacar.
Juan del Álamo, tiene un sitio en este momento excepcional. Ya de capote enganchó a su primero de salida y con la muleta, enganchando al toro de lejos y llevándoselo atrás del todo, hizo que pareciera mejor el toro que en verdad era. Espadazo entera, en la suerte contraria, que le daría la primera oreja de la tarde y la quinta en cinco tardes consecutivas en esta plaza. En su segundo no pudo ser por la mala condición del astado.
El festejo tuvo una duración de 2 horas y 5 minutos.